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martes, 18 de febrero de 2014

BackTrip: TUMBLEWEED CONNECTION


Elton John
"TUMBLEWEED CONNECTION"
DJM, 1970

Elton John no suele estar entre los músicos mas reivindicados de los 70 y sin embargo su producción de aquella década fue descomunal (12 LP's entre 1970 y 1979) y excelente en términos de calidad musical.

Su tercer disco, "Tumbleweed Connection", se convirtió en el proyecto más ambicioso al no repetir la formula de éxito del segundo y crear una obra conceptual sobre el oeste americano. La mayoría de canciones no sigue la estructura convencional de canción Pop. Aún así, el experimento supone un éxito en ambos lados del Atlántico gracias a las letras evocadoras de Bernie Taupin y al gran momento melódico en que se encuentra Elton John.

La musica de este álbum se reparte entre Country y Blues, con aromas a heno y ganado, con imágenes en sepia de bares y caminos polvorientos, como ilustra la portada.
Hay que destacar la excelente instrumentación, con el omnipresente piano de Elton John; las guitarras de Caleb Quaye, la batería de Nigel Olsson y el bajo de Dee Murray que le dan apoyo melódico; los grandes coros de Leslie Duncan, Dusty Springfield y Madeline Bell, además de los espléndidos arreglos de Paul Buckmaster que acentúan la sensación dramática del álbum; todos ellos dirigidos magistralmente por el productor Gus Dudgeon.

En resumen, Elton John dio cuerpo a las fantasías líricas de Bernie Taupin y juntos concibieron un álbum digno de ser rescatado en este blog para descubrimiento de muchos y recuerdo de otros.

Puedes escuchar Tumbleweed Connection en Spotify.

jueves, 11 de julio de 2013

Concert For Montserrat

En septiembre de 1997, sir George Martin reunió en un lugar tan emblemático como el Royal Albert Hall a varios músicos de renombre por una noble causa, recaudar fondos para ayudar a la población de la isla de Montserrat debido al desastre causado dos años antes por el volcán Soufriere Hills. El concierto fue retransmitido en España por M-80 con la colaboración de Julian Ruiz y grabado por un servidor en una cinta cassette TDK de 90 minutos. Fue una de las grabaciones que más habré escuchado en mi adolescencia, en aquella época en la que andaba obsesionado con cualquier cosa que tuviera relación con los Beatles. Aún no me había hecho con la discografía completa del grupo y atesorar un directo reciente de McCartney era algo para mí de un valor incalculable (por entonces no existía Internet). Guardé aquel Concert For Montserrat con los comentarios de Julian Ruiz intercalados como oro en paño, ya que me parecía una grabación única, una especie de alineación planetaria que se producía con muy poca frecuencia. Ahora, después de tantos años, cuando veo el DVD original del Concert for Montserrat no me siento ni la mitad de asombrado que cuando escuchaba aquella cinta TDK. Dentro de poco cumpliré 34 añazos (escribí esta entrada hace meses y ya los he cumplido xD) y tendré el doble de la edad que tenía por entonces, así que se me ha ocurrido hacer una retrospectiva del concierto haciendo memoria de aquellas emocionantes primeras escuchas.



Tras la solemne presentación de sir George Martin, el primer músico que apareció en el escenario fue Phil Collins. Por aquel entonces, iluso de mí, creía que era toda una figura internacional, una vaca sagrada respetada por crítica y público. Se arrancó con Take Me Home, el tema que cierra su álbum No Jacket Required de 1985 y en el que siempre he notado una gran influencia de la primera obra de Peter Gabriel. Es curioso lo de este hombre, debe ser duro pasar de ser una rutilante estrella del pop en los ochenta, tanto en solitario como con Genesis, a ser ahora un músico repudiado por cualquier entendido en música. No debe sentar muy bien forjar una carrera de éxito y que años después se devalúe ante tus ojos con el paso del tiempo. No hay foro en Internet sobre música en el que se hable bien de Phil Collins, un músico ya retirado y aquejado por múltiples dolencias cuyo último lanzamiento discográfico ha sido un triste álbum de versiones de la Motown. A mí me da bastante pena, aunque tengo que reconocer que no escucho sus discos ni por equivocación. 

Dos actuaciones que se produjeron en el Concert For Montserrat, pero que no fueron retransmitidas por M-80 en su momento, fueron las de Arrow & His Band y la de Jimmy Buffet. Como no las escuché en su día ni recuerdo haberlas visto en el DVD, no tengo nada que decir sobre ellas. Por cierto, en el DVD oficial omiten la participación de Midge Ure, el que fuera lider de Ultravox, mientras que los temas que cantó si fueron radiados por M-80 en su momento. Creo recordar que se arrancó en acústico con dos antiguos éxitos que le quedaron bastante bien: Dancing With Tears In My Eyes y Vienna. Carl Perkins, por su parte, realizó sin saberlo su última actuación multitudinaria en directo interpretando el clásico Blue Suede Shoes, un tema propio cuyo éxito le fue arrebatado por Elvis Presley a finales de los cincuenta. Cuatro meses después de aquella actuación, Perkins fallecía victima del cáncer.



Mark Knopfler interpretó Brothers In Arms y Money For Nothing, temas de aquel exitoso álbum de los Dire Straits que fue grabado precisamente en los estudios Air que George Martin se había construido en Montserrat. La vinculación de George Martin con esta isla venía por aquel estudio abierto en tierras paradisíacas que indirectamente aumentó el turismo en la isla gracias a la llegada de músicos de primera línea desde todos los puntos del planeta para grabar con el mítico productor de los Beatles. Volviendo a la actuación de Mark Knopfler no me parece muy reseñable, aunque la participación de Sting en los coros de Money For Nothing es curiosa e incluso histórica, ya que es la única vez que ambos la interpretaban en directo tal y como fue registrada en el estudio. Sting, por su parte, canta Every Little Thing She Does Is Magic de una forma bastante convencional, pero se sale con un acústico de Message In A Bottle en el que deslumbra con una versión acústica y pausada de dicho tema. De hecho, me gusta más que la versión oficial de The Police y quizá sea la mejor interpretación de un tema en todo el Concert For Montserrat.


Tanto Elton John como Eric Clapton cumplen discretamente con su cupo de canciones. Ese tramo del concierto era el que se me hacía más largo y pesado. Julian Ruiz decía solemne que Elton John nunca más volvería a interpretar Candle In The Wind en directo y a mí, sinceramente, me daba igual. Con el tiempo he aprendido a apreciar la obra de Elton John de principios de los setenta, aunque por entonces su música no me gustaba nada por la imagen que guardaba de su etapa más reciente, cuando creó la banda sonora para The Lion King o bailando el Don't Go Breaking My Heart con Ru Paul. Eric Clapton interpretó entre sus tres canciones una versión acústica de Layla. El tema cambia una barbaridad con respecto a la versión oficial de Derek And The Dominoes y creo que tardé años en relacionarlos. Si Message In A Bottle en acústico es una maravilla, Layla en acústico, sacada quizá del famoso Unplugged de Clapton, es un verdadero tostón (al menos para el que esto suscribe). Cómo podemos ver, en las interpretaciones de buena parte del plantel de músicos, lo acústico tenía pegada a finales de los noventa, debido quizá al éxito de los famosos MTV Unplugged.


El plato fuerte de la noche era Paul McCartney y sir George Martin lo dejó para el final a sabiendas de que era el más esperado. No recuerdo las palabras exactas que uso para presentarlo, pero eran muy emotivas en los oídos de cualquier fan de los Beatles. McCartney se marcó la consabida Yesterday para continuar después con el sorpresón de la noche: el final completo de Abbey Road con Golden Slumbers / Carry That Weigth / The End. Esta era mi parte favorita del concierto, ya que por entonces me acababa de comprar Abbey Road y lo escuchaba varias veces al día. Andaba obsesionado con él y fue una gran sorpresa escuchar las primeras notas del piano de Golden Slumbers. Phil Collins se marcó el sólo de batería de Ringo en The End y Julian Ruiz babeaba entre exclamaciones por la emoción del momento. Decía algo así como "el corazón se te va con ellos" o no sé que más. Después de aquello, era difícil mantener el nivel y McCartney se arrancó con un Hey Jude en el que también tomaron parte Sting y Elton John, aunque al primero de ellos le falló el micro en las primeras frases. Para poner punto y final al evento, Macca se marcó una de las versiones que los Beatles habían publicado en Beatles For Sale: Kansas City / Hey Hey Hey que cantó con ganas y sirvió como cierre perfecto para un concierto que, en su momento, me pareció legendario.

domingo, 31 de marzo de 2013

Pequeños flops entre grandes hits (Parte 3 de 3).

Confieso que cuando Manuel se puso a hacer estas entradas sobre pequeños flops en discos de Grandes Exitos, una irrefrenable ansiedad por poner a caldo determinados temas de varios de mis grupos/artistas favoritos se apoderó de mi, hasta el punto de solicitar al mismo Manuel la posibilidad de crear una tercera pata a semejante lista. No es la primera vez que una entrada en el blog se tiene que separar en tres o mas partes, por lo que, tampoco se crea un precedente. Lo que si podemos crear con estas entradas es una buena masa de enemigos del blog. No es nuestra intención, por supuesto.


The Rolling Stones: It´s Only Rock And Roll (But I Like It).

Lo siento, pero no. La canción tiene un titulo fantástico que define la esencia stoniana casi como ninguna otra, pero como canción es un cero a la izquierda. En 1974 los Stones ya habían dado lo mejor de si mismos (aunque todavía quedarían algunos buenos discos por grabar) y el álbum It´s Only Rock And Roll no pasaba de ser un álbum comparsa en comparación con lo que le precedía. Ojo, defiendo ese disco (como tambien Goats Head Soup y Black and Blue), pero no así la canción que le da titulo y que fue, posiblemente, uno de sus últimos grandes himnos de rock de los setenta. Aun así,no cuela. Me resulta cansina y hasta aparatosa. En directo la cosa tampoco ha mejorado, y me duele verla compartir cartel de clásico inmortal junto con Jumping Jack Flash, Brown Sugar Gimmie Shelter, canciones que están a años luz de esta mediocre Es solo rock and roll (pero me gusta).



R.E.M: What´s The Frecuency Kenneth?

R.E.M tienen una de las discografías que mas me han marcado desde siempre. Hasta 1994 creo que es casi infalible. Con cada disco daban un paso hacia adelante en la búsqueda de esa excelencia musical que encontraron en discos fundamentales para mi como Document o Automatic For The People. Solo Out Of Time supone para mi un paso atrás, pero nada relevante si entendemos su obra en conjunto. En 1994 editaron Monster, un disco que me gustó mucho y me sigue gustando hoy dia. Dentro de una colección potente de canciones eléctricas y distorsionadas, sobresale negativamente, la pesadísima What´s The Frecuency Kenneth. Nunca la soporté, a pesar, insisto, de que Monster me parece todo un acierto como álbum. Era un tema que me recordaba a lo peor de ese sonido indi americano tan de moda en esos años, pero pasado por un tamiz pomposo y que para nada conectaba con los inicios del grupo y aquella facilidad de componer temas pegadizos, que tenían a mediados de los ochenta. Absolutamente prescindible, aunque la gente se volviera loca en sus conciertos.


Prince: Peach.

En 1993, Prince decidió editar su primer gran recopilatorio de grandes éxitos. Y lo hizo en formato triple (el tercer disco incluía sus caras B mas representativas del periodo 78-93). Ademas, como gancho, incluía dos nuevos temas. Uno de ellos, este Peach, que ostenta el dudoso merito de ser la sintonía archiconocida del programa Corazón Corazón de TVE y desde hace un montón de años. Con eso, ya lo digo todo. La canción no es mala, pero palidece con lo que Prince era capaz de parir en aquellos años. Rebaja su caché creativo para entregar un tema destinado a enganchar a las masas, olvidando cualquier atisbo de calidad  e innovación, que siempre han sido marca de la casa en el genio de Minneapolis. A veces pienso que es un refrito de la excelente Cream de un par de años antes. Pero no llega ni a eso.


Elton John: Nikita.

Muchos pensamos que Elton John murió en 1976. Por lo menos, el mejor Elton John. Un músico al que siempre he tenido aprecio por lo que hizo mas que por lo que hace. Fueron los ochenta (a pesar de su innegable éxito comercial) los que llevaron a Elton a jugar en la liga de lo más comercial. Perdió gran parte de su atractivo creativo para abrazar con ganas la comercialidad mas superflua. Nikita, y su insoportable video clip, supuso el paradigma de lo que fue el peor Elton John. El de los ochenta. No la soporto cuando suena en cualquiera de sus Greatest Hits tras maravillas como Your Song o Tiny dancer. Acabas lamentando que Elton pagara gustoso ese peaje que lo llevó de actuar con el mismísimo John Lennon a hacerlo con gente como Ronan Keating o el rapero Eminem.


U2: Sunday Bloody Sunday.


He sido muy fan de U2. En mi juventud (no tan lejana) fui un seguidor  obsesivo. Hasta el punto que aun son el grupo al que mas veces he visto en directo y en un numero mayor de giras. Ahora la cosa no es así y los veo y escucho con mucha frialdad y añoranza por lo que un día fueron y ya no son. Maldito dinero. En cualquier caso, dentro de su poco discutible legado ochentero, Sunday Blood Sunday ya no hay por donde cogerla. Eco de un dudoso pasado comprometido de la banda, el uso cansado y repetitivo de su mensaje y el inevitable paso del tiempo le han pasado factura. Ahora mismo me resulta fuera de lugar, de tiempo y sin ese ápice combativo y melódico que tan atractivo me resultaba en su día. Ademas, cantada por el Bono actual, roza la autoparodia.



Tom Petty: Free Falling. 

Pobre Tom. Si supiera que he metido su Free Falling en esta entrada, me dejaría de hablar. Pero es que de todas sus canciones mas conocidas, esta es la que mas me chirría. Reconozco el encanto que tiene para engatusar a las masas, a la MTV y los 40 Principales, pero es una canción sin chispa. De esas que el bueno de Tom podría componer con los ojos cerrados. Ademas, la producción de Jeff Lyne le sienta muy mal, a diferencia de la mayoría de temas que componen el imprescindible Full Moon Fever. Free Falling se corea en todos los recintos donde actúa (quizás tras American Girl sea su canción mas conocida popularmente) pero no aporta nada a la carrera del rubio de Florida. Es mas, pienso que ni siquiera hace justicia al verdadero estilo de Petty. No pasaría nada si la dejara bien guardada en un baúl y retomara otras canciones de su repertorio mucho mas incontestables.


Bruce Springsteen: Dancing In The Dark.

Los que crecimos con Bruce en los ochenta, no podemos olvidar nunca el impacto que causó en nosotros el video de Dancing In The dark y los bailes de Springsteen con una joven Courtney Cox. Visto hoy dia, puedo afirmar que pocos vídeos pueden ser tan poco representativos de la carrera de un músico como ese. La canción la compuso Bruce por encargo expreso de su productor/manager Jon Landau, cuando este, insatisfecho con el resto de temas que iban a formar parte del álbum Born In The USA, le pidió una canción comercial y que sirviera de carta de presentación del disco. A regañadientes, Bruce entrego este tema de impecable factura pero de exagerada tendencia al consumo masivo. Todo el mundo bailó al son de Dancing In The Dark como dos años antes lo habían hecho al ritmo de Billie Jean. A Bruce le cayeron los dólares como si fueran copos de nieve, pero le costó recuperarse del desastre de imagen y pomposidad del video y de esos sintetizadores. Cuando ahora suena en directo es otra cosa (innegable su poso rock, claro esta) pero a mi me sobra de cada cien, cien.