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miércoles, 6 de mayo de 2020

Covers extraordinarias en Youtube

Ayer al volver por la noche de trabajar me dio por buscar en youtube versiones acústicas de canciones que me gustan y, sin mucho esfuerzo, conseguí encontrar estas maravillas que me gustaría compartir en el blog.

Sufjan Stevens - The Predatory Wasp of the Palisades Is Out To Get Us!

Elina


Esta chica no publica nada en su canal de youtube desde hace cuatro años, pero además de esta versión tiene otras igual de buenas de Sujfan Stevens, Fleetwood Mac (los buenos, los de Nicks & Buckingham), The Police o Simon & Garfunkel. Me gusta como desnuda esta canción hasta la médula. Las canciones de Sufjan se caracterizan por tener miles de coros e instrumentación anexa, pero Elina interpreta en cada parte del tema lo que verdaderamente importa. Esta versión me pone los pelos de punta por ese quiebro en su voz en la coda final de la canción.

Unknown Mortal Orchestra - Multi-Love

Kimmy Schram


Esta chica lleva dos años sin publicar nada en su canal de youtube. Además de esta versión, tiene otras de Lana del Rey, Fran Ocean, Amy Winehouse o Lorde. El álbum Multi-Love de Unknown Mortal Orchestra fue uno de mis mayores descubrimientos en 2019 y encontrar esta versión al ukelele ha vuelto a redimensionar mi admiración por el tema. En el momento en el que entra la batería en el tema original, Kimmy aumenta la potencia de su voz y empieza a rasgar las cuerdas del ukelele con más fuerza. Su voz es impresionante... sin embargo, buena parte de los comentarios que se hacen en el vídeo son de chicas preguntando por su pelo.

Bon Iver- 715 / Creeks

Maranda James


Esta chica sólo tiene cuatro versiones en su canal de youtube. Ésta de Bon Iver, otra de Angel Olsen, Leonard Cohen y un tal Keaton Henson. 715 / Creeks es mi canción favorita de 22 A Million, el tercer álbum de Bon Iver. Siempre me ha parecido injusto que maltratara tanto este tema en su versión oficial sin apenas instrumentación y esa distorsión de la voz que, a pesar de todo, no logran destrozarla. Andaba buscando una versión desnuda sin distorsión alguna y encontré esta versión de Maranda que, sin ser exactamente lo que buscaba, me ha sorprendido por ese toque tan a folk irlandés. Me ha flipado.

martes, 14 de febrero de 2012

Top 3: Mejores Canciones Internacionales 2011


03. Wilco - Whole Love


Si todo el mundo prefiere I Might como mejor canción del último trabajo de Wilco, yo me desmarco con este encantador tema que pone título al álbum. Reconozco que I Might es una canción enorme influenciada por el mejor Bowie, pero Whole Love presenta unas credenciales que la hacen heredera directa de los Byrds. Siempre he sido muy raro en cuanto a mis favoritas de Wilco, ya que mi preferida de Sky Blue Sky siempre será Leave Me (Like You Found Me) en lugar del consabido Impossible Germany. Whole Love es una canción jangle pop con aroma country que atesora unos acordes de guitarra realmente bellos. El etéreo comienzo da paso abruptamente a la voz en falsete de Tweedy en las estrofas, para después desembocar en esa guitarra en bucle de intenso aroma campestre.



02. Death Cab For Cutie - You´re A Tourist


En retrospéctiva, una de las mayores satisfacciones de 2011 ha sido descubrir a un grupo como Death Cab For Cutie. Era reacio a escucharlos porque pensaba que un grupo que empieza por "Death..." sólo puede parir música aburrida y oscura. Sin embargo, ironías de la vida, me encuentro con un pop brillante capaz de competir en igualdad de condiciones con The New Pornographers. You're A Tourist es una canción de una pieza con un comienzo inmejorable, ese riff de guitarra acompañado por la voz de Ben Gibbard saturada de eco. Por cierto, siento repetirme hablando de esta canción en concreto, cuando no hace mucho le dediqué algunas líneas al comentar el último álbum del grupo, Codes And Keys.



01. Bon Iver - Holocene


Hace meses dije que el último trabajo de Bon Iver era con bastante seguridad el mejor álbum que había escuchado en 2011. Sinceramente, veía difícil que alguién pudiera superar el asombroso nivel de este disco y Pitchfork lo ha aupado finalmente al nº 1 de su ranking de álbumes. No haré un ranking de discos, pero tengo claro que el último trabajo de este hombre sería con seguridad mi nº 1 particular. Holocene es quizá su mejor canción, en dura pugna con el precioso vals de Michicant y sus afilados acordes. Siento ponerme poético, pero Holocene parece rezumar calidez humana en un inhóspito paisaje helado. Si antes mencionabamos los acordes de Whole Love por su luminosidad, en este caso la hipnótica guitarra de Holocene transmite todo lo contrario.

miércoles, 14 de septiembre de 2011

Bon Iver - Bon Iver


Desde finales de julio estoy enganchado al segundo álbum de Bon Iver, hacia mucho tiempo que no escuchaba algo tan especial. No voy a decir que estoy de vuelta de todo, pero si que me resulta difícil encontrar un disco que me parezca tan soberbio y único a la vez. Me lo pongo mientras conduzco, en el mp3 mientras intento conciliar el sueño o en el tocadiscos de casa. Mi hermana fue la que me lo regaló en vinilo por mi cumpleaños a principios de julio y, de no ser por ella, me habría quedado sin disfrutar de esta maravilla.

El caso es que su álbum debut titulado For Emma, Forever Ago no me llamó la atención en su día y puedo asegurar que he vuelto a él varias veces después de que este nuevo trabajo me haya atrapado con tanta fuerza. A pesar de los intentos, For Emma, Forever Ago sigue sin transmitirme nada. ¿Cómo puede parecerme indiferente su primer álbum para caer rendido ante este segundo? ¿Son la misma persona los autores de ambos trabajos?

Ya los primeros acordes de Perth, el corte de apertura, empiezan a sumergirte en el particular mundo que encierra este disco. Bon Iver es un álbum denso y melancólico que a la vez resulta accesible, ya que mientras por un lado está la quejumbrosa voz de su autor, por el otro no faltan los reconocibles y magistrales acordes de guitarra acústica que arropan a cada tema. A todo ésto habría que sumar la particular textura que envuelve todas las canciones, consecuencia directa de que el propio Justin Vernon sea el responsable absoluto de su sonido. Sin ingenieros ni productores, un músico que no necesita intermediarios entre él y su público.


También resulta evocador, al menos para los de mi generación, ese aroma ochentero que guardan muchos de los cortes, alcanzando su punto álgido en la canción que cierra el álbum, Beth/Rest. El sonido del piano con el que abre este tema acompañado de un saxofón stingniano resulta de lo más retro que he escuchado en una canción actual, sin olvidar otra gran referencia como dejar en la cara B del primer single una versión del I Can't Make You Love Me de Bonnie Raitt que es capaz de ponerte la piel de pollo de campo. De hecho, dudaba si dejar al final de esta entrada la mencionada versión o uno de los temas originales del disco.

Todo esto que hablamos de texturas y recuerdos evocadores no serviría de nada sin unas canciones excelentes. Holocene, por ejemplo, guarda en su interior unas arrebatadoras melodías acompañadas de una sempiterna guitarra (aquello que hablábamos de los magistrales acordes). Michicant va creciendo y creciendo hasta desembocar en una catarsis producida por la simple introducción de... ¿una pedal steel? Corregidme si me equivoco, lo mío no es identificar instrumentos. El caso es que la adición de esa pedal steel después de una parte más pausada de la canción deja un efecto precioso. Perth va acompañada de una percusión tan dinámica que me recuerda a la de Manu Katché en That Voice Again de Peter Gabriel, con continuos avances y retrocesos similares a los de un ejercito en una guerra de trincheras (ésto último lo leí en un libro sobre Peter Gabriel y siempre he querido meter la comparación en alguna parte).

Se nos queda en el tintero hablar sobre el comienzo tan soberbio de Minnesota WI, los inolvidables ecos de Hinnom TX o las majestuosas melodías de Calgary, el primer single del álbum. Tan sólo decir que la peor canción es Lisbon OH, un instrumental de transición que dura minuto y poco más. Si en el blog puntuáramos los discos que comentamos, no dudaría en ponerle un diez a esta gran obra maestra.