Portada del single Heaven Knows I'm Miserable Now/Suffer Little Children
La canción que cierra el primer álbum de los Smiths siempre ha sido una de mis favoritas del grupo. El sentido fraseo de Morrissey junto a la hipnótica línea de guitarra de Marr me parecen sublimes. Es un tema poco conocido que no suele aparecer en recopilatorios, pero que para mí está a la altura de sus mejores clásicos. Esa admiración que siento por Suffer Little Children adquirió una nueva perspectiva cuando leí la biografía de los Smiths escrita por Johnny Rogan y titulada Morrissey & Marr - La Alianza Rota. Si antes de leer el libro me hubiera tomado la molestia de traducirla, habría descubierto la aterradora realidad que retrata la críptica letra que Morrissey utiliza en esta canción.
Los hechos relatados en Suffer Little Children ocurrieron a mediados de la década de los sesenta en Manchester y son conocidos como los asesinatos del páramo. Ian Brady, un perturbado con aficiones sadomasoquistas y simpatía por el nazismo, conoció a Myra Hindley en la empresa química Millward's para la que ambos trabajaban. Juntos comenzaron una relación en la que Brady inició a Hindley en sus perversas aficiones, entre las que destacaba la tortura de animales vivos en los Páramos de Saddleworth. Esta perturbadora afición se les fue de las manos cuando juntos engañaron a su primera victima, una chica de dieciséis años llamada Pauline Read, que sería conducida a los Páramos de Saddleworth con el pretexto de encontrar un guante de Hindley. Una vez allí, Pauline fue torturada, violada y asesinada por ambos, quedando su cuerpo enterrado en un lugar indeterminado del páramo. Este macabro ritual lo repetirían al menos cinco veces según se probó en el juicio con otros tantos menores de edad, aunque algunas fuentes indican que la cifra podría elevarse nada menos que a diecisiete niños cuyas desapariciones no pudieron ser relacionadas con el caso. Los tres primeros asesinatos demostrados se produjeron en dicho páramo, mientras los últimos se llevaron a cabo en la casa de la pareja, donde torturaban a sus victimas mientras sonaba de fondo el I Feel Fine de los Beatles.
"Edward see those alluring lights, tonight will be your very last night" (Edward, ¿ves esas luces llamativas?, esta noche será tu última noche) habla de Edward Evans, la última víctima de la pareja y cuyo asesinato fue presenciado de forma fortuita por David Smith, el cuñado de Myra Hindley. El tal Smith se ofreció a acompañar a Hindley a su casa después de que ésta hiciera una visita a su hermana. Mientras Smith leía la etiqueta de una botella de vino ya en casa de Hindley, escuchó un grito prolongado y descubrió a Ian Brady ensañándose con el cuerpo ya inerte de Edward Evans. Smith prometió a la pareja que no diría nada de lo ocurrido, pero inmediatamente después se presentó en la comisaria para denunciar los hechos. La pareja fue condenada a cadena perpetua tras el juicio. Myra Hindley murió en la cárcel a finales de 2002 tras un ataque cardíaco y una complicación pulmonar. Ian Brady sigue vivo, pero ha intentado suicidarse en varias ocasiones.
"Edward see those alluring lights, tonight will be your very last night" (Edward, ¿ves esas luces llamativas?, esta noche será tu última noche) habla de Edward Evans, la última víctima de la pareja y cuyo asesinato fue presenciado de forma fortuita por David Smith, el cuñado de Myra Hindley. El tal Smith se ofreció a acompañar a Hindley a su casa después de que ésta hiciera una visita a su hermana. Mientras Smith leía la etiqueta de una botella de vino ya en casa de Hindley, escuchó un grito prolongado y descubrió a Ian Brady ensañándose con el cuerpo ya inerte de Edward Evans. Smith prometió a la pareja que no diría nada de lo ocurrido, pero inmediatamente después se presentó en la comisaria para denunciar los hechos. La pareja fue condenada a cadena perpetua tras el juicio. Myra Hindley murió en la cárcel a finales de 2002 tras un ataque cardíaco y una complicación pulmonar. Ian Brady sigue vivo, pero ha intentado suicidarse en varias ocasiones.
Morrissey era un niño por aquella época y lo ocurrido le tocó muy de cerca. Él mismo podría haber terminado enterrado en Saddleworth si el destino lo hubiera cruzado con Ian Brady y Myra Hindley. La letra que después escribió para Suffer Little Children tiene frases tan certeras que demuestran lo impactado que quedó. Cuando dice "Lesley-Anne with your pretty white beads" (Lesley-Anne con tus bonitas cuentas blancas) se refiere a Lesley Ann Downey, cuya cadáver fue identificado gracias al collar de cuentas blancas que colgaba de su cuello. En "Oh John you'll never be a man and you'll never see your home again" (Oh John nunca serás un hombre y nunca verás tu hogar nuevamente) se refiere a John Killbride, un chico que fue interceptado por la pareja de asesinos en el mercado de Ashton-Under-Lyne tras salir del cine. La frase "A woman said: "I know my son is dead, I'll never rest my hands on his sacred head" (Una mujer dijo: "Sé que mi hijo está muerto Nunca posaré mis manos en su sagrada cabeza") se refiere a la madre de Keith Bennet, cuyo cadáver nunca fue hallado al no ofrecer los asesinos ningún dato sobre su ubicación.
Suffer Little Children apareció como último tema del álbum debut de los Smiths, pero también como cara B del sencillo Heaven Knows I'm Miserable Now. Al formar parte de aquel single, sonó fortuitamente en un pub de Manchester en el que se encontraba un familiar de una de las víctimas. Las quejas de este pariente por la temática de la canción tuvieron eco en el periódico Manchester Evening News, que le dio amplia cobertura mediática y consiguió que las cadenas comerciales Boots y Woolsworths retiraran de la venta el sencillo y el álbum debut de los Smiths. La discográfica Rough Trade no sabía nada de los asesinatos del páramo y se sorprendió del perjuicio económico que podría causarles este asunto. Fue Scott Piering, el publicista de los Smiths, el que consiguió contactar con la madre de otra de las victimas y convencerla de que la críptica letra era más un homenaje a los niños asesinados que un intento de lucrarse por parte del grupo. El asunto se zanjó finalmente cuando el familiar agraviado que había escuchado la canción en el pub llegó a un acuerdo con Marr y Morrissey para que donaran parte de los derechos de la canción a la Sociedad Nacional para la Prevención de la Crueldad contra los Niños.
2 comentarios:
Tremenda historia. Me he quedado de piedra al leerla. Desconocía la historia por completo.
Ahora mismo no caigo con la canción en cuestión (la habré escuchado muchas veces) pero no doy con ella mentalmente.
Hoy me la pondré nuevamente y leeré la letra con atención.
Gran relato Manuel.
Es muy fuerte todo lo que este tema lleva detrás. Esta canción me marcó desde que la escuché, no por la letra sino en la música. Me parece increíble, por eso me impacto tanto descubrir todo este trasfondo.
Gracias a ti por comentar ;)
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