sábado, 3 de marzo de 2012

EELS - Blinking lights and other revelations


Sin duda Mark Oliver Everett es uno de esos tipos peculiares a los que merece la pena prestarle un poco de atención, aunque sea por mero interés sociológico. Por cierto, casi nadie le llama por su auténtico nombre sino por un escueto Mr E o E a secas; desde luego que no llega al nivelazo del líder de The Mysterians quien, pese a llamarse Rudy Martínez, eligió como nombre artístico el enigmático ?; incluso se dice que se lo cambió legalmente y todo. Pero no nos desviemos: E es el líder de EELS.

En realidad básicamente él es EELS (el resto de componentes van y vienen, y aunque algunos colaboradores han sido más o menos fijos no puede hablarse de una formación duradera). Y precisamente por esto la carrera musical de EELS es tan inestable y sinuosa como lo es la vida de Mr E, que bien podría haber sido escrita por Esquilo o Eurípides (todo empieza con "E" hoy, vaya). Lo curioso es que no solo su trágica vida ha ido marcando el devenir de su carrera musical, sino que al mismo tiempo y por encima de todo ha sido su música la que le ha ayudado a sobrevivir y sobreponerse a todos los golpes que le ha ido dando el destino: desde encontrar a su padre muerto una mañana e intentar reanimarlo sin éxito hasta que, tras una serie de fallidos intentos, por fin su hermana toxicómana se suicide. Cosas así. Por cierto, su padre fue el que "inventó" o "ideó" la teoría de los universos paralelos, lo que son las cosas.

El señor que está detrás de la barba es E

El hecho es que E decidió un buen día marcharse de casa de sus padres rumbo a Los Angeles para intentar meter la cabeza en el mundillo de la música: sufriendo, trabajando como un burro, componiendo sin descanso y grabando canciones compulsivamente en su cuatro pistas consiguió publicar sus primeros discos, los primeros firmados como E y los siguientes como EELS (la idea era que sus discos tanto en solitario como con la banda quedaran juntos en las estanterías de las tiendas de discos; solo ocurre que nadié se acordó en ese momento de bandas como Eagles o Earth Wind & Fire).

Si hay algo que caracteriza a EELS, aparte de la barba de su líder, es su eclecticismo e imprevisibilidad: a poco que uno escuche un par de discos o conciertos de la banda no sabe con qué puede encontrarse en la siguiente escucha, y de una vez para otra podemos pasar de, por ejemplo, de pop acústico a funk o lo que quiera que sea que se le ocurra a E en ese momento. Todo depende de su estado de ánimo, o de las ganas que tenga de cambiar de aires.



Y llegó el día en que E maduró y pensó en grabar un disco que así lo reflejara, y le salió este soberbio Blinking Lights and Other Revelations. ¿Es su mejor trabajo? Pues por ahí debe andar, yo personalmente tengo mis dudas entre este y el Beautiful Freak, depende del día, pero sin duda este Blinking lights... tiene muchas muchísimas papeletas. Pudiera ser por tratarse de un disco más "convencional", si es que este calificativo puede casar con EELS, pero aún así no es un disco sencillo. Ni mucho menos.

Para empezar no lo fue su creación: en este disco en concreto el proceso de grabación, mezcla y masterización le llevó siete años. No de manera continuada desde luego, pero de un modo u otro sí en el interior de la cabeza de E: en un momento dado, tras todos los golpes que había ido encajando de mejor o peor manera a lo largo de su existencia, pensó que la muerte le había estado rondando demasiado tiempo y decidió grabar un disco que tratara sobre estar vivos, sobre el amor y la idea de Dios. Eso no significa que este sea un disco alegre, de hecho es bastante melancólico aunque la idea central fuera celebrar la vida: con las cosas buenas que tiene y con las malas también. De hecho, para E este trabajo supone una liberación: desde luego no puede quitarse de encima todos los malos tragos que ha ido pasando, pero por el otro quiere reconocer que también le han pasado cosas buenas. En fin, en eso consiste estar vivo, ¿no?

E y Bobby, reconocido públicamente como su mejor amigo

Tras mucho tiempo y trabajo logra reunir un total de 33 canciones (incluyendo una colaboración de su ídolo Tom Waits), y sabiéndose poseedor de un disco rotundamente bello se encuentra con la desagradable noticia de que a la discográfica no le interesa en absoluto su nuevo trabajo. E y los que le rodean se han dejado el alma en este trabajo, rozando el límite mismo de la cordura (la masterización y secuenciación del mismo le llevan meses), pero parece ser que a nadie más le interesa: precisamente el disco en el que cantaba a la alegría de vivir le lleva a una depresión.

Finalmente, y tras varias carambolas y cambio de discográfica, Blinking Lights and Other Revelations se publica exitosamente: el álbum cosecha buenísimas críticas, y E siente que, como tantas veces en su vida, tanto sufrimiento lleva consigo su parte de gozo y alegría. De hecho se convierte en su mayor éxito hasta la fecha, a pesar de no ser comercial (para empezar a las compañías nunca le han gustado los discos dobles) y no tener demasiada promoción.



Escucha Blinking Lights and Other Revelations en spotify pulsando aquí.

4 comentarios:

Beatles dijo...

Queridos amigos uno de mis premios "liebster blog" es para vosotros.

Os pongo el enlace del post para que lo disfrutéis y si lo creeis conveniente sigáis con ello.

Un abrazo.

http://cuandosuenalacampana.blogspot.com/2012/03/premio-liebster-blog.html

Alex J. Sales dijo...

Je, je...Cómo te ha influido la lectura del libro...muy bueno.

Bruno dijo...

¡Es cierto!

Se me olvida nombrarlo en el artículo: recomendamos desde MIMS la lectura de la "autobiografía" (de "autoayuda") escrita por E: Cosas que los nietos deberían saber (Mark Oliver Everett.

Saludos.

Manuel J dijo...

El disco es una absoluta delicia a pesar de ser doble. Muchas gracias por la recomendación ;)