martes, 20 de julio de 2010

Tiempo de Leyenda, un documental de José Sánchez Montes

Excelente documental sobre la gestación del álbum La Leyenda del Tiempo de Camarón de la Isla, lo más parecido que se ha hecho sobre un álbum en español al buen hacer de la serie Classic Albums, colección de DVDs que tantas satisfacciones nos ha dado a los melómanos. Cuenta con la colaboración de los principales implicados en su elaboración y visionarlo es visita obligada para cualquier aficionado a la música, no siento requisito indispensable que sea un aficionado al flamenco. Mi intención no es hacerme el ecléctico escribiendo esta reseña, pero estamos hablando de un buen documental que te atrapa desde el primer minuto con las torpes pero visionarias palabras rescatadas de una entrevista a Camarón: "Cuando hago un disco no pienso en lo que van a decir, porque yo sé que de momento no lo van a comprender, tiene cierto tiempo para que lo entiendan, pero a la larga yo sé que si es bueno o es malo, ahí está".

Es obligado apuntar que no me gusta el flamenco, lo único que he escuchado hasta ahora ha sido La Leyenda del Tiempo y, después de él, no me he atrevido a ahondar más en el género. Recuerdo las primeras escuchas del disco esperando encontrar un álbum en la línea de los primeros discos de Triana, un disco donde el rock y el flamenco se fusionaran de una forma más evidente, así que la sorpresa fue mayúscula cuando me dí cuenta de que La Leyenda del Tiempo es un trabajo más conservador de lo que en realidad esperaba. Siendo un completo desconocedor, mi primera impresión fue la de enfrentarme a un disco de flamenco convencional con contadas sorpresas, aunque imagino que la presencia del bajo y la batería en varios temas puede resultar más chocante para alguien que sólo haya escuchado seguidillas, bulerías, etc. Ya digo, el álbum se me hizo difícil de digerir y la pretendida fusión se me hace casi anecdótica: podríamos hablar por ejemplo del sitar añadido en Nana del Caballo Grande (el Norwegian Wood del flamenco xD) o el armazón construido por el grupo Alameda en torno a la versión de La Tarara. Canciones como Romance del Amargo o Bahía de Cádiz podrían considerarse flamencas en todos los sentidos, sin rastro alguno de esa pretendida fusión de la que hace alarde el álbum. Y, sin embargo, después de algunos años coqueteando con él, he llegado a quedar cautivado con canciones por las que no habría apostado en un principio. Escuchadas ahora, Homenaje a Federico o Tangos de la Sultana se han transformado después de muchas escuchas en temas cautivadores que no necesitan del azucar del bajo o la batería para ser temazos en toda regla.

El documental que nos ocupa habla sobre la grabación del álbum y las cruciales colaboraciones de Kiko Veneno y Raimundo Amador, el primero de ellos aportando emblemáticas composiciones y el segundo grabando guitarras mestizas en plena luna de miel con su reciente esposa o aguantando una fuerte gripe que casi le impide ir al estudio. Como todo buen documental, utiliza el recurso previo de ponernos en antecedentes con la brevedad y la maestría suficientes como para entrar en el meollo del asunto lo antes posible. Se habla del disco Rock Encounter del guitarrista Sabicas con Joe Beck o el grupo Smash como verdaderos precursores de la fusión del rock y el flamenco, situando al álbum de Camarón como un eslabón más en el género cuyo mérito principal fue hacerlo llegar a más gente por tratarse de la obra de una de las principales figuras de la época.


En casos como éste, cuando una figura consolidada decide romper con la imagen que transmite a su público para sacar algo distinto por amor al arte (nunca mejor dicho), la valentía para hacerlo adquiere tanto valor como la propia música. Pasados más de treinta años de la publicación del presente álbum, cuando el mestizaje se ha convertido en el recurso más devaluado de la música, es interesante recordar otra época en la que mezclar géneros irreconciliables podía suponer enfrentarse al público que compraba tus discos. El documental habla entonces de las reacciones adversas de las personas que compraban el álbum y querían devolverlo después porque decían que ese "no era un álbum de Camarón". Incluso algún crítico que menosprecio el disco en el momento de su salida al mercado, recula ahora en el documental para afirmar que es una de las piezas fundamentales para entender el flamenco hoy día.

PD: Gracias a Bruno por pasarme el documental ;)

2 comentarios:

Bruno dijo...

El documental es muy muy recomendable, como dices tanto para aficionados al flamenco como para novatos (revolver, va por ti). A mi me pareció un "Classic Albums" pasado por Sevilla.

Me quedó viendo el documental mi lado cotilla con la duda de qué pasó con Manuel Molina, que se apunta algún conflicto pero no se aclara. En cuanto a la grabación, me pareció interesante el proceso de elaboración de los temas, aunque un poco improvisado: aquí hay un percusionista brasileño, que se venga... Al final el sonido es una inesperada mezcla donde aparecen instrumentos rock, ecos latinos...

Lo único que me pareció realmente malo en el documental es el final con la orquesta holandesa que versionaba "La leyenda del tiempo": estas covers de orquestas siempre siempre siempre han sonado fatal, no aprenden.

Manuel J dijo...

Los comentarios de Manuel Molina en el documental son un coñazo, sinceramente. Vale que tuviera una gran influencia durante la grabación del álbum, pero me parece un tío insoportable en sus gestos y forma de hablar. Ricardo Pachón me cae mejor y, si tuviera que darle la razón a alguno de ellos sobre el motivo porque el que Camarón se fue de la casa de Manuel Molina, me quedo con la de Pachón, sólo por no dar la razón al barbudo loco ese. "Que era cuando Camarón canta bieeeeeeeeeeeeen"... insoportable xD Si, lo de la orquesta holandesa es un final forzado para justificar la influencia del disco de una forma puntual. Yo creo que habría quedado más bonito un recorrido por el flamenco a partir de La Leyenda del Tiempo para demostrar su influencia. Por ejemplo, incluso en la wikipedia dicen que el uso del cajón se consolida en el flamenco a partir del disco de Camarón. Lo de Holanda es muy impersonal, demasiado rígido.

Gracias por comentar ;)