Hoy me apetece rescatar una de las grandes satisfacciones que me ha dado 2012 en cuanto a música. A principios de este año nos tomamos un descanso del blog y nos propusimos desconectar de este medio cortando de una forma algo radical. Justo después descubrí Port Of Morrow, el cuarto álbum de The Shins, y por el reciente cerrojazo me lamenté por no poder compartir desde aquí mis impresiones sobre lo bueno que me parecía este nuevo trabajo del grupo. Como algunos sabréis, después del verano nos reenganchamos al blog y ahora en noviembre he caído en la cuenta de que tengo pendiente escribir una reseña sobre esta rotunda y reciente obra maestra del pop.
Si hace algunos días dije que Band Of Horses había fallado en la composición de temas para Mirage Rock, en Port Of Morrow ha ocurrido justamente lo contrario. La cuarta entrega de The Shins es, a mí juicio, el mejor álbum del grupo aunque, según parece, la repercusión no ha sido tan importante como en trabajos anteriores. Hablando por supuesto desde el corazón, Port Of Morrow me parece un álbum pop perfecto de principio a fin. ¿Cual es la peor canción? Difícil elección, pues todas tienen su encanto. Quizás la más floja esté entre Bait And Swith y Fall Of' 82, pero me niego a hablar mal de dos temas que sólo pierden si son comparados con el resto. Empezamos un repaso tema por tema con el que voy a disfrutar bastante, ya que nunca está de más una enésima escucha de este maravilloso álbum.
El tema más sui generis del álbum es el primero de todos, The Rifle's Spiral. Una canción pop distorsionada que da el pistoletazo de salida y que aporta algunos trazos de oscuridad entre tanto pop de trazos más positivistas. Simple Song es el single de adelanto del álbum, una elección más que acertada al encontrarnos ante uno de los cortes más emocionantes de la carrera de The Shins. Os dejo al final de la entrada una interpretación acústica de este tema que demuestra como la emoción va intrínseca a la composición en sí y que los instrumentos de acompañamiento en el álbum son simples adornos para una creación soberbia desde su génesis. Simple Song no hace honor a su nombre, no tiene nada de simple, y es quizá mi corte favorito del álbum junto a 40 Mark Strasse o No Way Down. It's Only Life es el grower del álbum, un tema lento que no parece cuadrar demasiado bien en las primeras escuchas, pero que poco a poco va cautivando al oyente. Dijimos que Bait And Switch podría ser uno de los temas de menos nivel, pero sólo por comparación con el resto. Esta canción va envuelta en música de influencias tropicales que choca un poco al principio, pero que termina siendo aceptada. Quizá otro enfoque distinto me habría hecho valorar mejor este tema. September se suma desde las primeras escuchas al listado de medios tiempos memorables del grupo junto a Pink Bullets o Young Pilgrims. James Mercer sigue sin dar tregua con un tema lento, pero seguro.
No Way Down es quizá una de mis favoritas, ya lo dije antes. Pop con mayúsculas para crear un tema que, después de pocas escuchas, parece haber estado con nosotros toda la vida. For A Fool es otro grower, al igual que It's Only Life. Su secreto radica en unos solemnes acordes de guitarra que nos retrotraen a los ochenta y que nos introducen en un nuevo tema del que quedar prendado. Fall Of' 82 es un tema que parece escrito por un beatle en solitario. Me da muy buen rollo y no sabría decir si es más McCartney que Harrison. 40 Mark Strasse es la tercera en discordia tras Simple Song y No Way Down. Si dijimos que Simple Song era un tema pop emocionante, 40 Mark Strasse comienza melancólico para adentrarse en un torbellino de sensaciones gracias a los estribillos. Falsetes, coros que repiten las palabras finales... la estructura de este tema refuerza aún más las fabulosas melodías que Mercer compuso inicialmente. Una maravilla. Y llegamos al final con la canción que da título al álbum. Si empezamos oscuros pero psicodélicos con The Rifle's Spiral, terminamos tan oscuros pero con cierto toque solemne y triste. Una despedida apropiada para un álbum soberbio de principio a fin.
No sé cuanto tiempo habrá que esperar para un nuevo álbum de The Shins o Broken Bells, pero si Mercer continúa tan inspirado, ya está tardando. Álbum recomendadísimo para cualquier amante del pop que se precie de serlo.
3 comentarios:
Este disco fué una de esas noticias agradables que llegan de vez en cuando en la música. Captó mi atención de inmediato y lo he escuchado muchísimo. Para mi, esta entre lo mejor de este 2012.
Mis favoritas son la inicial The Rifle's Spiral, que me parece pop épico del bueno y la fantastica No way Down, que como bien dices parece que ha estado con nosotros toda la vida.
Gran disco. Pop en mayusculas.
Estoy escuchando ahora mismo por vez primera este disco.
La verdad es que los dos primeros trabajos de The Shins me parecen cojonudos, no sabría con cuál quedarme; pero desde entonces sus nuevos discos no me han terminado de gustar.
Le daré un par de oportunidades, pero soy de los que añoran su antiguo sonido.
Saludos
Nunca presté mucha atención a The Shins, no porque no me gusten, es cuestión de dedicarle tiempo al grupo, lo que me sorprende es que nadie, absolutamente nadie, ha hablado de este disco hasta esa reseña tan pormenorizada y detallada. Lo buscaré y le daré cancha. Saludos
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